Pregunta:
La madre de mi esposa se ha
en efecto separado de su hija en tiempos recientes. Mientras que había alguna
forma de comunicación era frecuentemente bastante turbulenta y acalorada. Mi
esposa ha tratado un número de veces de reestablecer contacto y aún su madre se
rehúsa, bastante tercamente, a responder. Ambos somos conversos y hemos
frecuentemente sentido que nuestra aceptación de la religión ha tenido que ver
en parte con la actitud negativa de su madre. Estaría agradecido si pudieran
aconsejarnos sobre qué podemos hacer para rectificar esta situación. JazakAllahu
Khairan (Que Allah le recompense con el bien)
Respuesta:
Alabado sea Allah
Las reacciones de las madres
no musulmanas hacia sus hijos que abrazan el Islam varían. Algunas madres son
pacíficas y pasivas considerando esto como un asunto personal el cual no afecta
la relación entre la madre y su hijo o hija. En tales casos, más piedad del
hijo hacia su madre hará que la madre admire y respete el Islam.
Otras madres adoptan un
enfoque más terco al comienzo pero la madre finalmente se da por vencida y
acepta la nueva religión como un hecho de vida después de que ve la
determinación y persistencia de su hijo lo cual puede conducir a la madre misma
a abrazar el Islam. En el tercer caso encontramos que algunas madres
constantemente son tercas al punto que pueden herir y oprimir a su hijo o hija.
Usualmente tales madres son ciegamente prejuiciosas porque consideran que su
hijo o hija se ha extraviado al dejar la fe de sus padres y ancestros y que
ella debe hacer algo para ayudar a que vuelva al camino correcto (de acuerdo a
la madre).
Las siguientes son tres
historias que ocurrieron en el tiempo del Profeta, la paz y las bendiciones
sean con él, que envolvieron a tres de los Sahaba (Compañeros del Profeta, paz
y bendiciones sean con él) que ilustran las reacciones de sus madres después de
que abrazaron el Islam:
Historia #1
Bajo la autoridad de Asmaa'
Bint Abi Bakr quien dijo: "Mi madre vino a visitarme un día. En ese tiempo
ella era todavía una politeísta y había un compromiso entre el Profeta, paz y
bendiciones sean con él, y los Quraish (una de las grandes tribus en Arabia que
vivía en Mecca en el periodo preislámico de ignorancia que solía disfrutar de
grandes poderes espirituales y financieros). Yo le solicité al Profeta, paz y
bendiciones sean con él, un veredicto religioso y dije: "Oh Profeta de
Allah, mi madre vino a visitarme, buscando mi ayuda; ¿debo mantener una buena
relación con ella?" "Sí, mantén una buena relación con ella"
dijo el Profeta, paz y bendiciones sean con él."
(Reportado por Bukhari y
Muslim, y esta narración aparece en Sahih Muslim con el # 1003)
En otra versión narrada por
Ahmad, Asmaa' Bint Abi Bakr dijo: "Mi madre vino a visitarme cuando ella
era aún una politeísta y vivía entre los Quraish. Ella estaba deseosa, es decir
necesitada, así que le pregunté al Profeta, paz y bendiciones sean con él, y
dije: "Oh Profeta de Allah, mi madre vino a mí y ella es una politeísta y
necesita ayuda. ¿Debería mantener una buena relación con ella?" Él dijo: "Sí,
mantén una buena relación con ella"".
Historia #2
Bajo la autoridad de Abu Huraira,
quien dijo: Solía llamar a mi madre al Islam cuando ella era aún una
politeísta. Un día, mientras estaba llamándola, ella mencionó algo sobre el
Profeta, paz y bendiciones sean sobre él, que detesto. Entonces me dirigí a ver
al Profeta, que la paz y bendiciones de Allah sean sobre él, mientras lloraba y
le informe: "Solía llamar a mi madre hacia el Islam y ella rechazaba. La
llamé hoy y ella mencionó algo sobre ti que detesto. Por favor súplica a Allah
por la bendición y la guía de Allah sobre ella. Luego el Profeta, que la paz y
bendiciones sean sobre él, dijo: "Oh Allah, guía a la madre de Abu
Hurairah. Entonces partí con mucha esperanza por la súplica del Profeta, la paz
y las bendiciones de Allah sean con él, sobre mi madre. Cuando llegué a casa,
encontré que la puerta estaba parcialmente abierta, mi madre oyó mis pasos y
dijo: Quédate Quieto Abu Huraira, entonces oí el agua correr; agregó: mi madre
realizó la ablución mayor, vistió sus ropas y se apresuró en abrir la puerta
sin cubrir su cabeza y dijo: "Nadie tiene derecho a ser adorado excepto
Allah y Muhammad, que la paz y bendiciones de Allah sean sobre él, es el
Mensajero de Allah." Regresé al Profeta, que la paz y bendiciones de Allah
sean sobre él, llorando de felicidad y le dije: te traigo buenas noticias;
Allah respondió tus súplicas y guió a la madre de Abu Hurairah. El Profeta, que
la paz y bendiciones de Allah sean sobre él, alabó y glorificó a Allah y dijo: "esto
es bueno" Dije: Oh Mensajero de Allah, pide a Allah que me haga a mí y a
mi madre nos haga amados entre los siervos creyentes de Allah y nos haga
amarlos. El Profeta, que la paz y bendiciones sean sobre él, dijo: "Oh
Allah haz que este siervo Tuyo y su madre (es decir Abu Hurairah y su madre)
sean amados por tus siervos creyentes y haz que los creyentes los amen. Desde
aquel entonces, no hubo un creyente que escuchara sobre mí, incluso sin verme,
que no me amara.
(Reportado en Sahih Muslim #
2491)
Historia #3
Bajo la autoridad de Sa'ad Ibn
Abi Waqas, que Allah este complacido con él, quien dijo que los versos del Corán
revelan sus historia. Dijo: "Umm Saa'ad (su madre) juró no hablar con él
nunca más no comer ni beber hasta que el renuncie al Islam. Ella dijo: "Tú
dices que Allah te ordena a obedecer a tus padres. Soy tu madre y te ordeno que
hagas esto (renunciar al Islam). Él dijo: Ella permaneció sin comer ni beber
por tres días hasta que se desmayó por la presión. Uno de sus otros hijos
llamado Umarah le dio agua a ella para beber. Y ella empezó a maldecir a Sa'ad,
luego Allah reveló este verso del Corán, el cual se traduce como:
"Le he
ordenado al hombre ser benevolente con sus padres. Pero no se les debe obedecer
cuando se esfuerzan por hacer que se Me asocien copartícipes, pues es sabido
que carecen de fundamento válido. Ante Mí compareceréis, y os informaré de lo
que hacíais.”
(Corán 29:8).
(Este hadiz es narrado por
Imam Ahmad en su Musnad y en Sahih Muslim bajo el #1748)
También Allah reveló otro
verso en el Corán, el cual se transmite como:
"Si
vuestros padres se esfuerzan por hacer que Me asociéis copartícipes no les
obedezcáis, pues es sabido que carecen de fundamento válido, pero tratadles con
respeto. Seguid el camino de los piadosos, pues ante Mí compareceréis y os informaré
de lo que hacíais.”
(Corán 31:15)
Basados en las historias
anteriores, uno puede determinar cómo tratar con una madre no creyente y puede
sacar las siguientes conclusiones:
La importancia de una buena
presentación del Islam a una madre no creyente y tratar amablemente de
convencerla como Abu Hurairah lo hizo (Historia #2).
Continúa haciendo el bien a
tu madre no creyente y recuerda que su incredulidad no justifica desobediencia
por el hijo o hija, y que hacer el bien a ella no contradice tu inocencia de
ella por ser una no creyente, si no lo contrario como se nota en el verso 15
del capítulo 31 del Corán, además, Allah nos ha ordenado de tratar al no
creyente de (forma) amable incluso si ellos se esfuerzan para hacer de su niño
un politeísta, por ser nuestros padres deseando que ellos abracen el Islam.
Sigue pidiendo sinceramente y
suplicando por la madre no creyente, teniendo la esperanza de que, Allah la
guíe como es evidente en la historia de Abu Hurairah (Historia #2).
La guía divina puede descender
después de numerosos esfuerzos del hijo y un fuerte rechazo de la madre como en
la historia de Abu Hurairah. Por consiguiente, el hijo no debe nunca rendirse o
abandonar, sino que debe continuar rezando y suplicando por la madre no
musulmana.
Sin importar cuán duro la
madre no creyente se esfuerce en hacer que el hijo renuncie al Islam y la
presión que ella ejercerá en contra de su hijo tal como dejar de comer o
maldecir al hijo, el hijo nunca debe rendirse ni darse por vencido ni debe él
retroceder lejos del camino recto, como uno de los Sahaba dijo a su madre
incrédula en una situación similar: "Si tú tuvieras cien (100) almas y
todas dejaran tu cuerpo una tras la otra, yo nunca renunciaré a mi religión
Islam)."
Parece que la madre de la
pregunta deliberadamente oprime a su hijo a través del alejamiento lo cual le
causa una ruptura emocional pero eso nunca debe debilitar al musulmán o hacer
flaquear su fe y creencia en su religión. No hay objeción en hacer a la madre
incrédula entender que usted no va a retroceder, sin embargo, ella (la madre)
puede amablemente pedirle cualquier cosa, y ella será inmediatamente complacida
excepto en abandonar esta religión. Pedimos a Allah que rápidamente la guíe al
camino recto y le de paciencia para llamarla al Islam y guiarle a la vía recta
y correcta.
Islam Q&A
Sheikh Muhammed Salih Al-Munajjid
Fuente:
Artículo "A Muslim treatment of mother who is an unbeliever" de la Fatwa No. 322Autor:
Islam Q&A
Publicado en:
http://islamqa.info/en/ref/322
Copyright:IslamQA© 1997-2011
Traducido del inglés al español por:
Umm Sakinah y Asiya Fátima