31 oct 2013

El trato hacia la madre cuando ella no es musulmana



Pregunta:
La madre de mi esposa se ha en efecto separado de su hija en tiempos recientes. Mientras que había alguna forma de comunicación era frecuentemente bastante turbulenta y acalorada. Mi esposa ha tratado un número de veces de reestablecer contacto y aún su madre se rehúsa, bastante tercamente, a responder. Ambos somos conversos y hemos frecuentemente sentido que nuestra aceptación de la religión ha tenido que ver en parte con la actitud negativa de su madre. Estaría agradecido si pudieran aconsejarnos sobre qué podemos hacer para rectificar esta situación. JazakAllahu Khairan (Que Allah le recompense con el bien)
Respuesta:
Alabado sea Allah
Las reacciones de las madres no musulmanas hacia sus hijos que abrazan el Islam varían. Algunas madres son pacíficas y pasivas considerando esto como un asunto personal el cual no afecta la relación entre la madre y su hijo o hija. En tales casos, más piedad del hijo hacia su madre hará que la madre admire y respete el Islam.
Otras madres adoptan un enfoque más terco al comienzo pero la madre finalmente se da por vencida y acepta la nueva religión como un hecho de vida después de que ve la determinación y persistencia de su hijo lo cual puede conducir a la madre misma a abrazar el Islam. En el tercer caso encontramos que algunas madres constantemente son tercas al punto que pueden herir y oprimir a su hijo o hija. Usualmente tales madres son ciegamente prejuiciosas porque consideran que su hijo o hija se ha extraviado al dejar la fe de sus padres y ancestros y que ella debe hacer algo para ayudar a que vuelva al camino correcto (de acuerdo a la madre).
Las siguientes son tres historias que ocurrieron en el tiempo del Profeta, la paz y las bendiciones sean con él, que envolvieron a tres de los Sahaba (Compañeros del Profeta, paz y bendiciones sean con él) que ilustran las reacciones de sus madres después de que abrazaron el Islam:
Historia #1
Bajo la autoridad de Asmaa' Bint Abi Bakr quien dijo: "Mi madre vino a visitarme un día. En ese tiempo ella era todavía una politeísta y había un compromiso entre el Profeta, paz y bendiciones sean con él, y los Quraish (una de las grandes tribus en Arabia que vivía en Mecca en el periodo preislámico de ignorancia que solía disfrutar de grandes poderes espirituales y financieros). Yo le solicité al Profeta, paz y bendiciones sean con él, un veredicto religioso y dije: "Oh Profeta de Allah, mi madre vino a visitarme, buscando mi ayuda; ¿debo mantener una buena relación con ella?" "Sí, mantén una buena relación con ella" dijo el Profeta, paz y bendiciones sean con él."
(Reportado por Bukhari y Muslim, y esta narración aparece en Sahih Muslim con el # 1003)
En otra versión narrada por Ahmad, Asmaa' Bint Abi Bakr dijo: "Mi madre vino a visitarme cuando ella era aún una politeísta y vivía entre los Quraish. Ella estaba deseosa, es decir necesitada, así que le pregunté al Profeta, paz y bendiciones sean con él, y dije: "Oh Profeta de Allah, mi madre vino a mí y ella es una politeísta y necesita ayuda. ¿Debería mantener una buena relación con ella?" Él dijo: "Sí, mantén una buena relación con ella"".
Historia #2
Bajo la autoridad de Abu Huraira, quien dijo: Solía llamar a mi madre al Islam cuando ella era aún una politeísta. Un día, mientras estaba llamándola, ella mencionó algo sobre el Profeta, paz y bendiciones sean sobre él, que detesto. Entonces me dirigí a ver al Profeta, que la paz y bendiciones de Allah sean sobre él, mientras lloraba y le informe: "Solía llamar a mi madre hacia el Islam y ella rechazaba. La llamé hoy y ella mencionó algo sobre ti que detesto. Por favor súplica a Allah por la bendición y la guía de Allah sobre ella. Luego el Profeta, que la paz y bendiciones sean sobre él, dijo: "Oh Allah, guía a la madre de Abu Hurairah. Entonces partí con mucha esperanza por la súplica del Profeta, la paz y las bendiciones de Allah sean con él, sobre mi madre. Cuando llegué a casa, encontré que la puerta estaba parcialmente abierta, mi madre oyó mis pasos y dijo: Quédate Quieto Abu Huraira, entonces oí el agua correr; agregó: mi madre realizó la ablución mayor, vistió sus ropas y se apresuró en abrir la puerta sin cubrir su cabeza y dijo: "Nadie tiene derecho a ser adorado excepto Allah y Muhammad, que la paz y bendiciones de Allah sean sobre él, es el Mensajero de Allah." Regresé al Profeta, que la paz y bendiciones de Allah sean sobre él, llorando de felicidad y le dije: te traigo buenas noticias; Allah respondió tus súplicas y guió a la madre de Abu Hurairah. El Profeta, que la paz y bendiciones de Allah sean sobre él, alabó y glorificó a Allah y dijo: "esto es bueno" Dije: Oh Mensajero de Allah, pide a Allah que me haga a mí y a mi madre nos haga amados entre los siervos creyentes de Allah y nos haga amarlos. El Profeta, que la paz y bendiciones sean sobre él, dijo: "Oh Allah haz que este siervo Tuyo y su madre (es decir Abu Hurairah y su madre) sean amados por tus siervos creyentes y haz que los creyentes los amen. Desde aquel entonces, no hubo un creyente que escuchara sobre mí, incluso sin verme, que no me amara.
(Reportado en Sahih Muslim # 2491)
Historia #3
Bajo la autoridad de Sa'ad Ibn Abi Waqas, que Allah este complacido con él, quien dijo que los versos del Corán revelan sus historia. Dijo: "Umm Saa'ad (su madre) juró no hablar con él nunca más no comer ni beber hasta que el renuncie al Islam. Ella dijo: "Tú dices que Allah te ordena a obedecer a tus padres. Soy tu madre y te ordeno que hagas esto (renunciar al Islam). Él dijo: Ella permaneció sin comer ni beber por tres días hasta que se desmayó por la presión. Uno de sus otros hijos llamado Umarah le dio agua a ella para beber. Y ella empezó a maldecir a Sa'ad, luego Allah reveló este verso del Corán, el cual se traduce como:
"Le he ordenado al hombre ser benevolente con sus padres. Pero no se les debe obedecer cuando se esfuerzan por hacer que se Me asocien copartícipes, pues es sabido que carecen de fundamento válido. Ante Mí compareceréis, y os informaré de lo que hacíais.”
(Corán 29:8).
(Este hadiz es narrado por Imam Ahmad en su Musnad y en Sahih Muslim bajo el #1748)
También Allah reveló otro verso en el Corán, el cual se transmite como:
"Si vuestros padres se esfuerzan por hacer que Me asociéis copartícipes no les obedezcáis, pues es sabido que carecen de fundamento válido, pero tratadles con respeto. Seguid el camino de los piadosos, pues ante Mí compareceréis y os informaré de lo que hacíais.”
(Corán 31:15)
Basados en las historias anteriores, uno puede determinar cómo tratar con una madre no creyente y puede sacar las siguientes conclusiones:
La importancia de una buena presentación del Islam a una madre no creyente y tratar amablemente de convencerla como Abu Hurairah lo hizo (Historia #2).
Continúa haciendo el bien a tu madre no creyente y recuerda que su incredulidad no justifica desobediencia por el hijo o hija, y que hacer el bien a ella no contradice tu inocencia de ella por ser una no creyente, si no lo contrario como se nota en el verso 15 del capítulo 31 del Corán, además, Allah nos ha ordenado de tratar al no creyente de (forma) amable incluso si ellos se esfuerzan para hacer de su niño un politeísta, por ser nuestros padres deseando que ellos abracen el Islam.
Sigue pidiendo sinceramente y suplicando por la madre no creyente, teniendo la esperanza de que, Allah la guíe como es evidente en la historia de Abu Hurairah (Historia #2).
La guía divina puede descender después de numerosos esfuerzos del hijo y un fuerte rechazo de la madre como en la historia de Abu Hurairah. Por consiguiente, el hijo no debe nunca rendirse o abandonar, sino que debe continuar rezando y suplicando por la madre no musulmana.
Sin importar cuán duro la madre no creyente se esfuerce en hacer que el hijo renuncie al Islam y la presión que ella ejercerá en contra de su hijo tal como dejar de comer o maldecir al hijo, el hijo nunca debe rendirse ni darse por vencido ni debe él retroceder lejos del camino recto, como uno de los Sahaba dijo a su madre incrédula en una situación similar: "Si tú tuvieras cien (100) almas y todas dejaran tu cuerpo una tras la otra, yo nunca renunciaré a mi religión Islam)."
Parece que la madre de la pregunta deliberadamente oprime a su hijo a través del alejamiento lo cual le causa una ruptura emocional pero eso nunca debe debilitar al musulmán o hacer flaquear su fe y creencia en su religión. No hay objeción en hacer a la madre incrédula entender que usted no va a retroceder, sin embargo, ella (la madre) puede amablemente pedirle cualquier cosa, y ella será inmediatamente complacida excepto en abandonar esta religión. Pedimos a Allah que rápidamente la guíe al camino recto y le de paciencia para llamarla al Islam y guiarle a la vía recta y correcta.

Islam Q&A

Sheikh Muhammed Salih Al-Munajjid




Fuente:
Artículo "A Muslim treatment of mother who is an unbeliever" de la Fatwa No. 322
Autor:
Islam Q&A
Publicado en:
http://islamqa.info/en/ref/322
Copyright:
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Traducido del inglés al español por:
Umm Sakinah y Asiya Fátima